10 de diciembre de 2016

Calabacín horneado con relleno cremoso de quinoa

También podés ver esta receta en nuestro nuevo blog: www.notonlysaladblog.com


Siempre me pareció que diciembre es el mes más lindo del año, y no sólo porque cumplo en Navidad (sí, me trajo Papá Noel). Tiene ese encanto de cuando la gente está de mejor humor porque empieza el calor (acá en el hemisferio sur), se acercan las vacaciones, y decoramos todo para la Navidad. También está la contrapartida... Estrés porque hay que cumplir con las obligaciones antes de irnos de farra, atravesar los pasillos de shoppings abarrotados de gente comprando regalos, y cumplir con quinientas reuniones de fin de año con amigos que nunca vemos (cada una con su respectiva organización de amigo invisible).
Para que nuestra pobre pancita no quede hecha pomada tras litros de alcohol (brindis pa'cá, brindis pa'llá), exceso de carbohidratos y sodio, es que les presento hoy una receta muy fácil de hacer y rica. Además, porqué no, puede ser parte del buffet de fin de año!





Ingredientes para 2 porciones:
1 calabacín chico (de aprox 800g)
1/2 cebolla colorada picada en cubitos chicos
1 diente de ajo picado bien fino
1/2 T de quinoa
1 Cda perejil picado
2 Cdas de queso crema
2 Cdas de queso parmesano rallado
aceite de oliva y pimienta 

Procedimiento:
1. Prender el horno a 180ºC.
2. Cortar el calabacín por el medio a lo largo, sacarle las semillas, y poner en una asadera con un fondo de agua. Hornear aprox una hora hasta que la pulpa esté tierna.
3. Lavar la quinoa en un bowl con agua, escurrir y cocinar con 1 1/4 T de agua fría. Primero ponela a fuego fuerte hasta que rompa el hervor, bajá el fuego a medio cocinando así 5 minutos más y después apagá la hornalla tapando la olla para que el vapor termine de hinchar los granos de quinoa.
4. Mientras saltar en un sartén la cebolla con el ajo. Tip: espolvoreales un poquito de sal para que suden y no se doren o quemen.
5. Mezclar la quinoa tibia con la cebolla y ajo, el perejil, quesos, fijate como está de sal y sazonalo a tu gusto.
6. Sacarle la pulpa al calabacín con la ayuda de una cuchara, cuidando de no romper la cáscara ya que nos va a servir de recipiente para poner el relleno. Mezclar esa pulpa hecha puré (pisada así nomás con un tenedor) con la mezcla de quinoa.
7. Rellenar las cáscaras de calabacín con la preparación. Podrías espolvorearle más queso rallado y gratinarlo en el horno, o servirlo simplemente rociado con aceite de oliva, pimienta y perejil, como hice yo. 

Un acompañamiento simple como hojas verdes o repollo y zanahoria rallado hacen el perfecto acompañamiento, qué te parece?

Lo único que toma tiempo de esta receta es el horneado de los calabacines, pero los tiramos en el horno y nos olvidamos de ellos durante ese rato. Mientras aprovechamos a hacer las miles de cosas pendientes!



Bon  appétit!

No hay comentarios:

Publicar un comentario